Tema 14: La programación en el segundo ciclo de educación infantil. Objetivos, contenidos y propuestas metodológicas más adecuadas para este ciclo. Las distintas unidades de programación. La continuidad entre la educación infantil y primaria. Medidas curriculares y vías de coordinación

INDICE

1. Introducción

2. La programación en el segundo ciclo de educación infantil

2.1. La programación didáctica

2.2. El segundo ciclo de educación infantil

3. Objetivos, contenidos y propuestas metodológicas más adecuadas para este ciclo

3.1. Objetivos

3.2. Contenidos

3.3. Propuestas metodológicas

4. Las distintas unidades de programación

5. La continuidad entre la educación infantil y primaria

6. Medidas curriculares y vías de coordinación

6.1. Medidas curriculares

6.2. Vías de coordinación

7. Conclusiones

8. Bibliografía

1. Introducción

En el ámbito educativo, la programación en el segundo ciclo de educación infantil desempeña un papel crucial en el desarrollo integral de los niños y niñas, sentando las bases para su crecimiento académico, social y emocional. Durante esta etapa, que comprende los niños de 3 a 6 años aproximadamente, se busca proporcionar un ambiente estimulante y enriquecedor que fomente la curiosidad natural de los pequeños, favoreciendo así su aprendizaje significativo.

El presente tema tiene como objetivo explorar la importancia de la programación en el segundo ciclo de educación infantil, así como analizar los objetivos, contenidos y propuestas metodológicas más adecuadas para esta etapa crucial en el desarrollo de los niños y niñas. La programación en este ciclo debe estar diseñada de manera cuidadosa y adaptada a las necesidades e intereses de los pequeños, promoviendo su participación activa y autónoma en el proceso de aprendizaje.

En este sentido, nos adentraremos en las distintas unidades de programación que pueden implementarse en el segundo ciclo de educación infantil, explorando cómo cada una de ellas contribuye al desarrollo de habilidades y competencias clave en los niños y niñas. Asimismo, abordaremos la continuidad entre la educación infantil y primaria, destacando la importancia de establecer vínculos coherentes y progresivos para garantizar una transición exitosa hacia el siguiente nivel educativo.

Además, consideraremos las medidas curriculares y las vías de coordinación que pueden establecerse entre los docentes y profesionales de la educación, asegurando así una planificación integral y cohesionada que potencie el desarrollo de los niños y niñas en todas sus dimensiones.

2. La programación en el segundo ciclo de educación infantil

2.1. La programación didáctica

La programación es el proceso sistemático de planificar, organizar y diseñar el proceso de enseñanza y aprendizaje, con el objetivo de alcanzar metas educativas específicas. Consiste en la elaboración de un conjunto de actividades, estrategias y recursos didácticos que se desarrollarán a lo largo de un período determinado, con el fin de facilitar la adquisición de conocimientos, habilidades y competencias por parte de los estudiantes.

Características de la programación didáctica

  1. Intencionalidad: La programación en educación se basa en una planificación deliberada y cuidadosa. Se identifican objetivos claros y específicos, se seleccionan los contenidos y se diseñan actividades y recursos que mejor se adapten a las necesidades y características de los estudiantes.
  2. Secuenciación: La programación implica establecer una secuencia lógica y progresiva de las actividades de enseñanza y aprendizaje. Los contenidos y habilidades se presentan de forma gradual, partiendo de lo más simple a lo más complejo, de modo que los estudiantes puedan construir conocimientos de manera coherente y significativa.
  3. Flexibilidad: La programación en educación debe ser flexible y adaptable a las necesidades y ritmos de aprendizaje de los estudiantes. Se deben tener en cuenta las diferencias individuales y brindar oportunidades para la personalización y la diversificación de las estrategias y actividades, con el fin de garantizar la participación y el éxito de todos los estudiantes.

Funciones de la programación didáctica

  1. Orientación: La programación proporciona una guía clara y precisa para los docentes, estableciendo los objetivos a alcanzar, los contenidos a desarrollar y las actividades a implementar. Ayuda a los educadores a enfocar y dirigir sus esfuerzos hacia el logro de los resultados deseados.
  2. Organización: Permite organizar de manera efectiva los recursos y el tiempo disponible en el proceso educativo. Define el cronograma de actividades, distribuye los contenidos en unidades o sesiones, y establece los recursos y materiales necesarios para cada etapa del proceso de enseñanza y aprendizaje.
  3. Evaluación: La programación en educación facilita la evaluación del progreso y el logro de los estudiantes. Permite establecer criterios de evaluación claros y diseñar instrumentos de evaluación coherentes con los objetivos y contenidos programados. Así, se pueden identificar fortalezas y áreas de mejora, ajustando la programación en función de los resultados obtenidos.

Fases de la programación didáctica

La programación didáctica es un proceso que implica la planificación y organización de las actividades de enseñanza y aprendizaje a lo largo de un período determinado. A continuación, se presentan las fases principales de la programación didáctica:

  1. Análisis de contexto: En esta fase, se realiza un análisis del contexto educativo en el que se llevará a cabo la programación didáctica. Esto implica considerar factores como el nivel educativo, las características del grupo de estudiantes, los recursos disponibles, el currículo y los objetivos establecidos por las autoridades educativas.
  2. Establecimiento de objetivos: En esta etapa, se definen los objetivos de aprendizaje que se pretenden alcanzar durante el período de programación. Los objetivos deben ser claros, específicos, medibles y estar alineados con el currículo y las necesidades de los estudiantes. Estos objetivos guiarán el diseño y desarrollo de las actividades de enseñanza y aprendizaje.
  3. Selección de contenidos o saberes básicos: En esta fase, se seleccionan los contenidos y temas que se abordarán durante el período de programación. Los contenidos deben ser relevantes, significativos y adecuados para los estudiantes, teniendo en cuenta sus intereses, necesidades y el currículo establecido. También se determina la secuencia y organización de los contenidos a lo largo del período.
  4. Diseño de situaciones de aprendizaje y recursos: En esta etapa, se diseñan las actividades, tareas y/o situaciones de aprendizaje que permitirán a los estudiantes alcanzar los objetivos propuestos. Se seleccionan y desarrollan estrategias y recursos didácticos apropiados, como materiales educativos, tecnología, juegos, proyectos, etc. Las actividades deben ser variadas, estimulantes y adaptadas a las características y estilos de aprendizaje de los estudiantes.
  5. Evaluación y seguimiento: Esta fase implica el diseño de estrategias de evaluación para medir el progreso y el logro de los estudiantes. Se establecen criterios de evaluación claros y se definen instrumentos y técnicas de evaluación adecuadas. Asimismo se debe evaluar la metodología, los recursos, el papel del docente,… Y establecer un plan de seguimiento y retroalimentación para ajustar y mejorar la programación a medida que se desarrolla.
  6. Reflexión y mejora: Después de implementar la programación, se lleva a cabo una fase de reflexión y evaluación sobre su efectividad. Se analiza cómo se desarrollaron las actividades, se revisan los resultados obtenidos y se identifican áreas de mejora. Esta reflexión permite realizar ajustes y mejoras para futuras programaciones.

2.2. El segundo ciclo de educación infantil

La Educación Infantil constituye la etapa educativa con identidad propia que atiende a niños y niñas desde el nacimiento hasta los seis años de edad. Esta etapa se ordena en dos ciclos. El primero comprende hasta los tres años y el segundo, desde los tres a los seis años de edad. La finalidad de la Educación Infantil es contribuir al desarrollo integral y armónico del alumnado en todas sus dimensiones: física, emocional, sexual, afectiva, social, cognitiva y artística, potenciando la autonomía personal y la creación progresiva de una imagen positiva y equilibrada de sí mismos, así como a la educación en valores cívicos para la convivencia.

Características de los niños de 3 a 6 años

Los niños y niñas en el rango de edad de 3 a 6 años experimentan un período de rápido crecimiento y desarrollo en múltiples áreas. Durante esta etapa, se manifiestan diversas características que son fundamentales para comprender su comportamiento, necesidades y la forma en que aprenden. Algunas de las principales características de los niños de 3 a 6 años son las siguientes:

  1. Curiosidad e imaginación: Los niños en esta edad muestran una curiosidad insaciable por el mundo que los rodea. Se sienten atraídos por nuevas experiencias, preguntas y exploraciones. Además, su imaginación es muy activa, lo que les permite crear situaciones y escenarios ficticios mientras juegan.
  2. Desarrollo del lenguaje: Durante estos años, el desarrollo del lenguaje experimenta un notable avance. Los niños aumentan su vocabulario y son capaces de expresar sus ideas y emociones de manera más clara y coherente. También inician la adquisición de habilidades de lectura y escritura.
  3. Socialización: Los niños de esta edad buscan interactuar y jugar con sus pares. Aprenden a compartir, a trabajar en equipo y a comprender las emociones y necesidades de los demás. La socialización es un aspecto crucial para su desarrollo emocional y habilidades sociales.
  4. Desarrollo motor: La coordinación motora sigue mejorando durante estos años. Los niños desarrollan habilidades físicas como correr, saltar, lanzar y atrapar objetos, lo que les permite participar en juegos y actividades más complejas.
  5. Autonomía: A medida que crecen, los niños buscan ser más independientes y autónomos. Quieren realizar tareas por sí mismos, como vestirse, comer o cuidar de sus pertenencias, lo que les ayuda a desarrollar un sentido de logro y autoconfianza.
  6. Juego simbólico: El juego simbólico se vuelve más elaborado en esta etapa. Los niños utilizan objetos y situaciones imaginarias para representar roles y escenarios, lo que les ayuda a comprender el mundo y desarrollar habilidades cognitivas y emocionales.
  7. Atención y concentración: Aunque su capacidad de atención sigue siendo limitada, los niños de 3 a 6 años mejoran su capacidad para concentrarse en tareas específicas y actividades por períodos más largos.
  8. Desarrollo emocional: Los niños de esta edad experimentan una amplia gama de emociones y aprenden a manejarlas. Desarrollan la empatía y comienzan a comprender y expresar sus propios sentimientos y los de los demás.
  9. Creatividad: La imaginación y la creatividad son características destacadas en esta etapa. Los niños disfrutan de actividades artísticas y disfrutan de la expresión a través del dibujo, la pintura y la creación de cosas nuevas.
  10. Aprendizaje a través del juego: El juego es la principal forma en que los niños de 3 a 6 años aprenden. A través de actividades lúdicas y experiencias prácticas, adquieren habilidades cognitivas, sociales y emocionales fundamentales para su desarrollo integral.

Es fundamental que los educadores, padres y cuidadores comprendan estas características para proporcionar un entorno adecuado y estimulante que promueva el crecimiento y aprendizaje óptimo durante esta importante etapa de la infancia.

3. Objetivos, contenidos y propuestas metodológicas más adecuadas para este ciclo

3.1. Objetivos

En el RD 95/2022 se indica que los objetivos son “logros que se espera que el alumnado haya alcanzado al finalizar la etapa y cuya consecución está vinculada a la adquisición de las competencias clave”. La legislación educativa actual diferencia entre competencias clave y específicas. De acuerdo a este decreto las competencias clave son “desempeños que se consideran imprescindibles para que el alumnado pueda progresar con garantías de éxito en su itinerario formativo, y afrontar los principales retos y desafíos globales y locales. Son la adaptación al sistema educativo español de las competencias clave establecidas en la Recomendación del Consejo de la Unión Europea de 22 de mayo de 2018 relativa a las competencias clave para el aprendizaje permanente” . Las competencias clave son:

  • Competencia en comunicación lingüística.
  • Competencia plurilingüe.
  • Competencia matemática y competencia en ciencia, tecnología e ingeniería.
  • Competencia digital.
  • Competencia personal, social y de aprender a aprender.
  • Competencia ciudadana.
  • Competencia emprendedora.
  • Competencia en conciencia y expresión culturales.

Las competencias específicas se definen como “desempeños que el alumnado debe poder desplegar en actividades o en situaciones cuyo abordaje requiere de los saberes básicos de cada área. Las competencias específicas constituyen un elemento de conexión entre, por una parte, las competencias clave y, por otra, los saberes básicos de las áreas y los criterios de evaluación.” Cada una de estas competencias específicas se relaciona con diferentes criterios de evaluación. Los criterios de evaluación permiten evaluar al alumno y conocer si cumple con el perfil de salida.

Los objetivos indicados en este decreto para la etapa de Infantil son:

  • a) Conocer su propio cuerpo y el de los otros, así como sus posibilidades de acción y aprender a respetar las diferencias.
  • b) Observar y explorar su entorno familiar, natural y social.
  • c) Adquirir progresivamente autonomía en sus actividades habituales.
  • d) Desarrollar sus capacidades emocionales y afectivas.
  • e) Relacionarse con los demás en igualdad y adquirir progresivamente pautas elementales de convivencia y relación social, así como ejercitarse en el uso de la empatía y la resolución pacífica de conflictos, evitando cualquier tipo de violencia.
  • f) Desarrollar habilidades comunicativas en diferentes lenguajes y formas de expresión.
  • g) Iniciarse en las habilidades lógico-matemáticas, en la lectura y la escritura, y en el movimiento, el gesto y el ritmo.
  • h) Promover, aplicar y desarrollar las normas sociales que fomentan la igualdad entre hombres y mujeres.

3.2. Contenidos

En la LOMLOE, el término contenidos ha sido sustituido por saberes básicos. En el RD 95/2022, los saberes básicos se definen como conocimientos, destrezas y actitudes que constituyen los contenidos propios de un área y cuyo aprendizaje es necesario para la adquisición de las competencias específicas. Se organizan en áreas correspondientes a ámbitos propios de la experiencia y del desarrollo infantil y se abordarán por medio de propuestas globalizadas de aprendizaje que tengan interés y significado para los niños y las niñas. Las áreas de la Educación Infantil son las siguientes:

Crecimiento en Armonía

Este área se centra en las dimensiones personal y social del niño o la niña, entendidas como inseparables y complementarias, que se desarrollan y regulan de manera progresiva, conjunta y armónica, aunque solo adquiere sentido desde la complementariedad con las otras dos, ya que se produce en un entorno físico y natural determinado y precisa de la utilización de distintos lenguajes y representaciones de la realidad.

Las competencias específicas del área identifican las actuaciones que se espera que niños y niñas sean capaces de desplegar en relación con su propio desarrollo personal y social a lo largo de la etapa, como consecuencia de la intervención educativa. Las tres primeras competencias específicas se refieren a aspectos relacionados con su propio desarrollo personal: el progresivo control de sí mismos que van adquiriendo a medida que construyen su propia identidad, comienzan a establecer relaciones afectivas con los demás y utilizan los recursos personales para desenvolverse en el medio de una forma cada vez más ajustada e independiente, valorando y confiando en sus posibilidades y cualidades, y respetando las de los demás. La última competencia específica atiende a la necesaria correlación entre la construcción de la propia identidad y las interacciones en el entorno sociocultural donde aquella se produce, resaltando la importancia de propiciar y favorecer interacciones sanas, sostenibles, eficaces, igualitarias y respetuosas.

Los saberes básicos del área se presentan en cuatro grandes bloques:

  • El cuerpo y el control progresivo del mismo.
  • Desarrollo y equilibrio afectivos
  • Hábitos de vida saludable para el autocuidado y el cuidado del entorno
  • Interacción socioemocional en el entorno. La vida junto a los demás.

Descubrimiento y Exploración del Entorno

Con esta área se pretende favorecer el proceso de descubrimiento, observación y exploración de los elementos físicos y naturales del entorno, concibiendo este como un elemento provocador de emociones y sorpresas, y tratando de que, junto con su progresivo conocimiento, niños y niñas vayan adoptando y desarrollando actitudes de respeto y valoración sobre la necesidad de cuidarlo y protegerlo.

El área se organiza en torno a tres competencias específicas. La primera se orienta al desarrollo de las destrezas que ayudan a identificar y establecer relaciones lógicas entre los distintos elementos que forman parte del entorno; la segunda se centra en el fomento de una actitud crítica y creativa para identificar los retos y proponer posibles soluciones; y la tercera supone el acercamiento respetuoso hacia el mundo natural para despertar la conciencia de la necesidad de hacer un uso sostenible de él, que garantice su cuidado y conservación.

Los saberes básicos de este área se organizan en:

  • Diálogo corporal con el entorno. Exploración creativa de objetos, materiales y espacios
  • Experimentación en el entorno. Curiosidad, pensamiento científico, razonamiento lógico y creatividad
  • Indagación en el medio físico y natural: cuidado, valoración y respeto.

Comunicación y Representación de la Realidad

Los diferentes lenguajes y formas de expresión que se recogen en esta área contribuyen al desarrollo integral y armónico de niños y niñas, y deben abordarse de manera global e integrada con las otras dos áreas, mediante el diseño de situaciones de aprendizaje en las que puedan utilizar diferentes formas de comunicación y representación en contextos significativos y funcionales. Se pretende desarrollar en niños y niñas las capacidades que les permitan comunicarse a través de diferentes lenguajes y formas de expresión como medio para construir su identidad, representar la realidad y relacionarse con las demás personas.

Las competencias específicas del área se relacionan con la capacidad de comunicarse eficazmente con otras personas de manera respetuosa, ética, adecuada y creativa. Por un lado, se aborda una perspectiva comunicativa y, por el otro, se persigue un enfoque interactivo en un contexto plurilingüe e intercultural.

Las competencias específicas en torno a las que se organizan los aprendizajes del área están orientadas hacia tres aspectos fundamentales de la comunicación: la expresión, la comprensión y la interacción para visibilizar las posibilidades comunicativas de los diferentes lenguajes y formas de expresión, aunque se concede un carácter prioritario al proceso de adquisición del lenguaje verbal. Por otra parte, la comunicación permite interpretar y representar el mundo en el que vivimos. Por ello, se incluye también una competencia específica relacionada con el acercamiento a las manifestaciones culturales asociadas a los diferentes lenguajes que se integran en el área, como un primer paso hacia el reconocimiento y la valoración de la realidad multicultural y plurilingüe desde la infancia. En el área se espera desarrollar las destrezas comunicativas, que irán evolucionando desde las primeras interacciones a través de la expresión corporal y gestual, ligadas básicamente a la satisfacción de sus necesidades primarias, hasta la adquisición de los códigos de diferentes lenguas y lenguajes, para producir, interpretar y comprender mensajes de creciente complejidad, de manera eficaz, personal y creativa.

La oralidad es el instrumento por excelencia para la comunicación, la expresión de vivencias, sentimientos, ideas y emociones, así como el aprendizaje y la regulación de la conducta. Por ello, su adquisición y desarrollo ocupa un lugar de especial relevancia en esta etapa. La lengua oral se irá estimulando a través de la mediación con la persona adulta, quien proporcionará modelos y dará sentido a las diversas interacciones, favoreciendo el acceso progresivo a formas y usos cada vez más complejos, incluidos algunos elementos de la comunicación no verbal.

Será preciso crear un ambiente multialfabetizador rico que comprenda todos los lenguajes posibles y que establezca relaciones entre ellos. Un contexto de interacción con iguales y personas adultas, que ejercen como modelos lectores y escritores, despertará la curiosidad, el interés y las ganas de explorar y descubrir el significado social y cultural del lenguaje escrito. Ese interés se incrementará si se dejan a su alcance libros y otros textos de uso social adecuados a su edad e intereses. Esta primera aproximación se debe producir en el quehacer cotidiano del aula, enmarcado en situaciones funcionales y significativas para los niños y niñas, teniendo claro que la adquisición del código escrito no es un objetivo que se deba alcanzar en esta etapa.

En esta etapa educativa se inicia también el acercamiento a la literatura infantil como fuente de disfrute y se empieza a tejer, desde la escucha en el contexto cotidiano de las primeras nanas, canciones de arrullo y cuentos, un vínculo emocional y lúdico con los textos literarios. Es la etapa de la literatura oral por excelencia: rimas, retahílas, folclore… La creación en el aula de un espacio cálido y acogedor donde ubicar la biblioteca favorecerá también el acercamiento natural a la literatura infantil, para construir significados, despertar su imaginación y fantasía, acercarlos a realidades culturales propias y ajenas, y presentarles otros mundos.

Asimismo, debe prestarse especial atención al desarrollo de actitudes positivas y de respeto tanto hacia el repertorio lingüístico personal, como al de los demás, despertando su sensibilidad y curiosidad por conocer otras lenguas e invitándolos a explorar otros lenguajes y formas de expresión.

Los niños y las niñas se encuentran inmersos en una sociedad en la que lo digital afecta a nuestra forma de comunicarnos, obtener información, aprender y relacionarnos. Es, por tanto, responsabilidad del centro educativo establecer pautas para el desarrollo de hábitos de uso saludables de las herramientas y tecnologías digitales, iniciándose así un proceso de alfabetización digital desde las primeras etapas.

Los lenguajes artísticos, en tanto que sistemas simbólicos, adquieren particular relevancia en esta etapa. Proporcionan un cauce diferente, variado y flexible para expresarse y relacionarse con el mundo exterior con mayor libertad. La primera infancia se asombra constantemente, porque nada se da por supuesto. La creatividad, tan presente en la etapa, tiene que ver con la curiosidad vital. La práctica educativa debe consistir en acompañarla y proporcionar las herramientas para consolidarla.

El lenguaje musical es un medio que permite la comunicación con los demás y posibilita el desarrollo de aspectos como la escucha atenta y activa, la sensibilidad, la improvisación y el disfrute a través de la voz, el propio cuerpo o los juegos motores y sonoros. De la misma manera, también se aproximarán al conocimiento de distintas manifestaciones musicales, lo que irá despertando su conciencia cultural y favorecerá su desarrollo artístico.

Con respecto al lenguaje plástico, en esta etapa se irán adquiriendo y desarrollando de forma progresiva diferentes destrezas, al tiempo que se experimentará con distintas técnicas y materiales para expresar ideas, emociones y sentimientos. A su vez, se pondrá a los niños y las niñas en contacto con diferentes modelos relacionados con diversas expresiones artísticas, para iniciar así el desarrollo del sentido estético y artístico.

Por último, el lenguaje corporal permite el descubrimiento de nuevas posibilidades expresivas, que pueden utilizarse con una intención comunicativa, representativa o estética.

La etapa se concibe como un continuo aprendizaje. Desde su nacimiento y a lo largo de toda la etapa, las experiencias vitales de niños y niñas se van ampliando y diversificando de manera progresiva. Paralelamente, se despertarán el interés y la curiosidad por descubrir y explorar las posibilidades expresivas de los diferentes lenguajes y formas de expresión para comunicarse de manera cada vez más eficaz, personal y creativa en los distintos contextos cotidianos.

Los saberes básicos de este área se organizan en:

  • Intención y elementos de la interacción comunicativa
  • Las lenguas y sus hablantes
  • Comunicación verbal oral: expresión, comprensión, diálogo.
  • Aproximación al lenguaje escrito
  • Aproximación a la educación literaria.
  • El lenguaje y la expresión musicales
  • El lenguaje y la expresión plásticos y visuales.
  • El lenguaje y la expresión corporales

Estas áreas deben entenderse como ámbitos de experiencia intrínsecamente relacionados entre sí, por lo que se requerirá un planteamiento educativo que promueva la configuración de situaciones de aprendizaje globales, significativas y estimulantes que ayuden a establecer relaciones entre todos los elementos que las conforman.

3.3. Propuestas metodológicas

Principios pedagógicos

En el RD 95/2022 y en relación con este tema se indican los principios pedagógicos que deben seguirse en la etapa de infantil:

  1. La práctica educativa en esta etapa buscará desarrollar y asentar progresivamente las bases que faciliten el máximo desarrollo de cada niño y de cada niña.
  2. Dicha práctica se basará en experiencias de aprendizaje significativas y emocionalmente positivas y en la experimentación y el juego. Además, deberá llevarse a cabo en un ambiente de afecto y confianza para potenciar su autoestima e integración social y el establecimiento de un apego seguro. Así mismo, se velará por garantizar desde el primer contacto una transición positiva desde el entorno familiar al escolar, así como la continuidad entre ciclos y entre etapas.
  3. En los dos ciclos de esta etapa, se atenderá progresivamente al desarrollo afectivo, a la gestión emocional, al movimiento y los hábitos de control corporal, a las manifestaciones de la comunicación y del lenguaje, y a las pautas elementales de convivencia y relación social, así como al descubrimiento del entorno, de los seres vivos que en él conviven y de las características físicas y sociales del medio en el que viven. También se incluirá la educación en valores.
  4. Asimismo, se incluirán la educación para el consumo responsable y sostenible y la promoción y educación para la salud.
  5. Además, se favorecerá que niños y niñas adquieran autonomía personal y elaboren una imagen de sí mismos positiva, equilibrada e igualitaria y libre de estereotipos discriminatorios.
  6. Las administraciones educativas fomentarán el desarrollo de todos los lenguajes y modos de percepción específicos de estas edades para desarrollar el conjunto de sus potencialidades, respetando la específica cultura de la infancia que definen la Convención sobre los Derechos del Niño y las Observaciones Generales de su Comité.
  7. De igual modo, sin que resulte exigible para afrontar la Educación Primaria, se podrá favorecer una primera aproximación a la lectura y a la escritura, así como experiencias de iniciación temprana en habilidades numéricas básicas, en las tecnologías de la información y la comunicación, en la expresión visual y musical y en cualesquiera otras que las administraciones educativas determinen.

Es importante mencionar que en el RD 95/2022 se indica que” las medidas organizativas, metodológicas y curriculares que se adopten se regirán por los principios del Diseño Universal para el Aprendizaje”

Diseño Universal del Aprendizaje

El Diseño Universal del Aprendizaje (DUA) es un enfoque educativo que busca proporcionar a todos los estudiantes, incluidos los niños de la primera etapa de educación infantil, igualdad de oportunidades para aprender y participar activamente en el proceso educativo. El DUA se basa en la idea de que la diversidad de los estudiantes es la norma y no la excepción, y que el currículo y las estrategias de enseñanza deben ser diseñados de manera flexible y adaptable para satisfacer las necesidades de todos los estudiantes.

En la primera etapa de educación infantil, que abarca desde el nacimiento hasta los tres años de edad, el DUA se puede aplicar de diversas formas para promover el aprendizaje y el desarrollo integral de los niños. Algunas consideraciones del DUA en esta etapa incluyen:

  1. Acceso a la información: Proporcionar a los niños múltiples formas de acceder a la información y los materiales. Esto puede incluir el uso de imágenes, sonidos, objetos manipulables y experiencias táctiles para que los niños puedan explorar y comprender el mundo que les rodea.
  2. Flexibilidad en las actividades: Ofrecer actividades y experiencias variadas que permitan a los niños explorar y aprender de diferentes maneras. Esto implica ofrecer opciones y adaptaciones según las habilidades, intereses y necesidades individuales de los niños.
  3. Apoyo a la autonomía: Fomentar la independencia y la autodirección de los niños, permitiéndoles tomar decisiones y participar activamente en su propio aprendizaje. Esto se puede lograr ofreciendo opciones y oportunidades para que los niños elijan y tomen decisiones dentro de los límites establecidos.
  4. Evaluación formativa: Utilizar estrategias de evaluación formativa que brinden retroalimentación continua y significativa a los niños, los padres y los educadores. Esto ayuda a comprender el progreso de los niños, identificar áreas de fortaleza y necesidades de apoyo, y ajustar las estrategias de enseñanza en consecuencia.
  5. Colaboración y comunicación: Fomentar la colaboración y la comunicación entre los padres, los educadores y otros profesionales que trabajan con los niños. Esto permite compartir información, ideas y recursos para apoyar el aprendizaje y el desarrollo de los niños de manera integral

4. Las distintas unidades de programación

Situaciones de aprendizaje

En el RD 95 /2022 se menciona que “la adquisición efectiva de las competencias clave se verá favorecida por el desarrollo de una metodología que reconozca a los niños y las niñas como agentes de su propio aprendizaje. Para ello se propone diseñar situaciones de aprendizaje estimulantes, significativas e integradoras, bien contextualizadas y respetuosas con el proceso de desarrollo integral del alumnado en todas sus dimensiones, que tengan en cuenta sus potencialidades, intereses y necesidades, así como las diferentes formas de comprender la realidad en cada momento de la etapa.

Las situaciones de aprendizaje deben plantear un reto o problema de cierta complejidad en función de la edad y el desarrollo del niño o la niña, cuya resolución creativa implique la movilización de manera integrada de lo aprendido en las tres áreas en las que se organiza la etapa, a partir de la realización de distintas tareas y actividades. Asimismo, deben partir del planteamiento claro y preciso de los objetivos que se esperan conseguir y cuyo logro suponga la integración de un conjunto de saberes básicos. Además, deben proporcionarse escenarios en los que se favorezcan distintos tipos de agrupamiento, desde el individual al trabajo en grupos, para que el alumnado pueda asumir responsabilidades individuales, así como trabajar de manera cooperativa para afrontar la resolución del reto planteado.

Estas situaciones favorecerán la transferencia de los aprendizajes adquiridos a la resolución de un problema de la realidad cotidiana del niño o la niña, en función de su progreso madurativo. En su diseño, se debe favorecer el desarrollo progresivo de un enfoque crítico y reflexivo, así como el abordaje de aspectos relacionados con el interés común, la sostenibilidad, el respeto a la diferencia o la convivencia, iniciándose en la gestión de las posibles situaciones de conflicto mediante el diálogo y el consenso. De igual modo, se deben tener en cuenta las condiciones personales, sociales o culturales de niños y niñas, para detectar y dar respuesta a los elementos que pudieran generar exclusión.”

En otras palabras podemos definir situación de aprendizaje como un escenario o contexto diseñado intencionalmente por el educador para promover el aprendizaje significativo y la adquisición de conocimientos, habilidades y competencias por parte de los estudiantes. Se trata de una experiencia planificada que busca generar un ambiente propicio para la exploración, la reflexión y la construcción activa del conocimiento. Una situación de aprendizaje involucra la participación activa de los estudiantes, quienes son retados a resolver problemas, investigar, experimentar y aplicar lo aprendido en situaciones reales o simuladas. Estas situaciones están diseñadas para ser desafiantes, relevantes y contextualizadas, lo que motiva a los estudiantes a comprometerse y desarrollar habilidades de pensamiento crítico, colaboración, creatividad y resolución de problemas. Tres ejemplos de situaciones de aprendizaje para la segunda etapa de educación infantil son:

  1. Tema: Explorando la naturaleza – “El jardín botánico en nuestra escuela” Descripción: Los niños y niñas participarán en una experiencia de aprendizaje en la que se habilitará un pequeño jardín botánico dentro de la escuela. Se les presentarán diferentes tipos de plantas y flores, y se les enseñará a identificarlas y cuidarlas. Los niños realizarán actividades prácticas como plantar semillas, regar las plantas y observar su crecimiento. También aprenderán sobre la importancia de las plantas en la naturaleza y cómo contribuyen a nuestro entorno.

Objetivos:

  • Fomentar el interés por la naturaleza y el cuidado del medio ambiente.
  • Desarrollar habilidades de observación y exploración.
  • Potenciar la responsabilidad y el respeto hacia las plantas y seres vivos.
  1. Tema: Descubriendo las formas y colores – “El mundo artístico de los pintores famosos” Descripción: Los niños se sumergirán en el mundo del arte y conocerán a algunos pintores famosos y sus obras. Se presentarán diferentes pinturas que destacan por su uso de formas y colores llamativos. Luego, los niños crearán sus propias obras de arte inspiradas en el estilo de los artistas presentados. Utilizarán técnicas de pintura con colores vivos y explorarán diferentes formas y figuras geométricas para expresar su creatividad.

Objetivos:

  • Estimular la creatividad y expresión artística.
  • Reconocer y apreciar el trabajo de artistas famosos.
  • Desarrollar habilidades motrices finas mediante la manipulación de materiales artísticos.
  1. Tema: Nuestra comunidad – “Pequeños científicos urbanos” Descripción: Los niños se embarcarán en un proyecto de investigación sobre su comunidad y su entorno cercano. Saldrán a explorar los alrededores de la escuela, observando los diferentes edificios, parques y espacios públicos. Utilizarán cuadernos de campo para registrar sus hallazgos y realizarán preguntas sobre cómo funcionan algunos elementos de la ciudad, como semáforos, fuentes y edificios altos. También entrevistarán a personas locales, como bomberos o policías, para aprender sobre su trabajo y su papel en la comunidad.

Objetivos:

  • Desarrollar habilidades de observación y pensamiento crítico.
  • Fomentar la curiosidad y el espíritu investigador.
  • Conocer y valorar su entorno cercano y las personas que contribuyen a la comunidad.

Aprendizaje por rincones

El aprendizaje por rincones, también conocido como “rincones de juego”, es una estrategia pedagógica que se utiliza en el contexto de la educación infantil y primeros años de la educación primaria. Consiste en organizar el espacio del aula en distintos rincones temáticos o áreas de juego, cada uno enfocado en diferentes actividades y experiencias de aprendizaje. Cada rincón ofrece oportunidades para que los niños exploren, descubran y participen activamente en el proceso de enseñanza-aprendizaje de manera lúdica y significativa. Algunos ejemplos de rincones son rincón de lectura, de juego simbólico, de arte, de ciencias y experimentos, de matemáticas…

Centros de interés

Los centros de interés son una estrategia educativa que se utiliza para organizar y planificar las actividades de aprendizaje en el aula. Consiste en seleccionar temas o conceptos que despierten el interés y la motivación de los estudiantes, y luego desarrollar actividades y experiencias de aprendizaje en torno a esos temas. El objetivo principal de los centros de interés es fomentar la participación activa de los estudiantes, hacer que el aprendizaje sea significativo y conectarlo con sus intereses y experiencias personales.

Aprendizaje por proyectos

El aprendizaje por proyectos es una metodología educativa que se basa en la realización de proyectos o actividades de investigación y creación que abordan un tema o problema concreto. En este enfoque, los estudiantes se convierten en protagonistas activos de su propio aprendizaje, ya que participan en la planificación, diseño, desarrollo y evaluación del proyecto. El aprendizaje por proyectos promueve la adquisición de conocimientos y habilidades de manera significativa y contextualizada, al tiempo que desarrolla competencias como la colaboración, la comunicación y el pensamiento crítico.

5. La continuidad entre la educación infantil y primaria

La continuidad entre la educación infantil y primaria se refiere a la coordinación y articulación efectiva entre estas dos etapas educativas con el fin de asegurar una transición exitosa y sin rupturas en el proceso de aprendizaje de los niños y niñas. La colaboración y el trabajo conjunto entre educadores y profesionales de ambas etapas son fundamentales para garantizar que los estudiantes puedan seguir desarrollando sus habilidades y competencias de manera progresiva y coherente.

Algunos aspectos clave para lograr la continuidad entre la educación infantil y primaria son:

  1. Coordinación pedagógica: Los docentes de educación infantil y primaria deben comunicarse y coordinar sus prácticas pedagógicas. Es esencial compartir información sobre los logros y necesidades de cada estudiante para que el proceso de aprendizaje pueda adaptarse de manera adecuada.
  2. Continuidad en contenidos y metodologías: Es importante que los contenidos y las metodologías utilizadas en ambas etapas estén alineados y sean coherentes. Los temas trabajados en educación infantil deben continuar desarrollándose en primaria para evitar interrupciones en el aprendizaje.
  3. Evaluación y seguimiento: La evaluación de los logros y avances de los estudiantes debe ser un proceso continuo y compartido entre educadores de ambas etapas. El seguimiento de su progreso permitirá identificar áreas de mejora y diseñar estrategias de apoyo si es necesario.
  4. Transición gradual: Es fundamental que la transición entre educación infantil y primaria sea gradual y acompañada. Se pueden realizar visitas a la futura escuela, actividades conjuntas entre grupos de ambas etapas y actividades de familiarización con el nuevo entorno.
  5. Adaptaciones curriculares: Para los estudiantes que requieran adaptaciones curriculares o necesidades educativas especiales, es fundamental que se realicen los ajustes necesarios de forma coordinada y planificada entre los docentes de ambas etapas.
  6. Participación de las familias: La colaboración y participación activa de las familias en el proceso de transición y continuidad educativa es esencial. Los padres y madres pueden brindar información valiosa sobre las características y necesidades de sus hijos, lo que facilitará la planificación y adaptación del proceso educativo.

La continuidad entre la educación infantil y primaria contribuye a que los niños y niñas se sientan seguros y confiados en su proceso educativo, facilitando su adaptación a la nueva etapa escolar y asegurando un desarrollo integral y armonioso a lo largo de su trayectoria educativa.

6. Medidas curriculares y vías de coordinación

6.1. Medidas curriculares

Las medidas curriculares son acciones y decisiones que se toman a nivel educativo para mejorar o adaptar el currículo con el objetivo de lograr una educación de calidad y acorde a las necesidades y contextos específicos de los estudiantes. En otras palabras, las medidas curriculares están relacionadas con la atención a la diversidad del alumnado.

En el RD 95/2022, en el artículo 13 sobre diferencias individuales encontramos la siguiente información:

  1.  La atención individualizada constituirá la pauta ordinaria de la acción educativa del profesorado y demás profesionales de la educación.
  2. La intervención educativa contemplará la diversidad del alumnado adaptando la práctica educativa a las características personales, necesidades, intereses y estilo cognitivo de los niños y las niñas e identificando aquellas características que puedan tener incidencia en su evolución escolar con el objetivo de asegurar la plena inclusión de todo el alumnado.
  3. Las administraciones educativas establecerán procedimientos que permitan la detección temprana de las dificultades que pueden darse en los procesos de enseñanza y aprendizaje y la prevención de las mismas a través de planes y programas que faciliten una intervención precoz. Asimismo, facilitarán la coordinación de cuantos sectores intervengan en la atención de este alumnado.
  4. Los centros adoptarán las medidas adecuadas dirigidas al alumnado que presente necesidad específica de apoyo educativo.
  5. Asimismo, adoptarán la respuesta educativa que mejor se adapte a las características y necesidades personales de los niños y niñas que presenten necesidades educativas especiales.
  6. Las administraciones educativas podrán incorporar a su oferta educativa las lenguas de signos españolas

Estas medidas pueden incluir:

  1. Diseño y actualización curricular: Revisar, adaptar y actualizar los planes de estudio y programas educativos para garantizar que sean relevantes, pertinentes y se ajusten a las necesidades actuales de los estudiantes y de la sociedad.
  2. Adopción criterios de evaluación adecuados: Establecer criterios de evaluación que evalúen lo que los estudiantes deben saber y ser capaces de hacer en cada etapa educativa
  3. Flexibilidad y diversificación: Proporcionar opciones, recursos y vías educativas que permitan adaptar el currículo a las características y necesidades individuales de los estudiantes, brindando oportunidades de aprendizaje más personalizadas.
  4. Atención a la diversidad: Implementar medidas para atender a la diversidad de los estudiantes, incluyendo adaptaciones curriculares, recursos y estrategias pedagógicas que respondan a las distintas capacidades, intereses y estilos de aprendizaje.
  5. Interdisciplinariedad: Fomentar la integración de contenidos y disciplinas para abordar temas de manera más amplia y contextualizada, promoviendo una visión más holística del conocimiento.
  6. Inclusión de nuevas tecnologías: Integrar las tecnologías de la información y la comunicación en el currículo para enriquecer las experiencias de aprendizaje, promover la alfabetización digital y facilitar el acceso a información actualizada.
  7. Evaluación formativa: Promover una evaluación continua y formativa que permita obtener información constante sobre el progreso de los estudiantes y ajustar la enseñanza en función de sus necesidades.
  8. Evaluación por competencias: Desarrollar estrategias de evaluación que permitan medir el desarrollo de las competencias y habilidades de los estudiantes de manera más integral.
  9. Desarrollo de proyectos y actividades prácticas: Fomentar el aprendizaje activo y significativo a través de la realización de proyectos, investigaciones, situaciones de aprendizaje y actividades prácticas que relacionen el conocimiento con la realidad.
  10. Promoción de la educación emocional y valores: Incluir en el currículo actividades y contenidos que fomenten el desarrollo de habilidades sociales, emocionales y valores éticos que contribuyan a una formación integral de los estudiantes.

6.2. Vías de coordinación

Las vías de coordinación en el ámbito educativo se refieren a los canales y mecanismos establecidos para facilitar la colaboración y el trabajo conjunto entre diferentes actores involucrados en el proceso educativo. La coordinación es fundamental para asegurar una planificación coherente, la transmisión de información relevante y la implementación efectiva de políticas y medidas educativas. Algunas de las vías de coordinación más importantes son las siguientes:

  1. Coordinación entre niveles educativos: La colaboración y comunicación entre las diferentes etapas educativas (educación infantil, primaria, secundaria, etc.) es esencial para garantizar una transición fluida y una continuidad en el proceso de aprendizaje de los estudiantes. Esto incluye la articulación de contenidos, objetivos y metodologías entre los distintos niveles educativos.
  2. Coordinación entre docentes: Los profesores de un mismo nivel educativo o de diferentes áreas deben coordinar sus prácticas pedagógicas y compartir información sobre los avances, dificultades y necesidades de los estudiantes. Esto favorece una visión integral del proceso de aprendizaje y permite implementar estrategias de apoyo adecuadas.
  3. Coordinación entre docentes y familias: La comunicación y colaboración entre los docentes y las familias son fundamentales para el desarrollo integral de los estudiantes. Mantener una comunicación abierta y constante permite compartir información relevante sobre el progreso académico y el bienestar de los niños, lo que favorece un trabajo conjunto en beneficio del estudiante.
  4. Coordinación con equipos de apoyo: Los equipos de orientación, pedagogos, psicólogos u otros profesionales de apoyo juegan un papel importante en la detección y atención de necesidades educativas especiales. La coordinación con estos equipos es clave para proporcionar el apoyo adecuado a los estudiantes que lo necesiten.
  5. Coordinación entre instituciones educativas y la comunidad: Las escuelas deben mantener una coordinación efectiva con las instituciones y organizaciones de la comunidad, como centros de salud, bibliotecas, museos, empresas y entidades culturales. Esto permite enriquecer el currículo y proporcionar a los estudiantes experiencias educativas más amplias y conectadas con el mundo real.
  6. Coordinación a nivel institucional: La dirección y el equipo directivo de la institución educativa deben promover una coordinación eficiente entre todos los miembros del personal docente y no docente. Esto incluye reuniones periódicas, planificación conjunta, compartir buenas prácticas y trabajar hacia objetivos comunes.
  7. Coordinación con autoridades educativas: Los centros educativos deben mantener una comunicación fluida con las autoridades educativas a nivel local, regional o nacional. Esto permite estar informado sobre las políticas y medidas educativas y facilita la implementación adecuada de las mismas.

7. Conclusiones

El segundo ciclo de educación infantil es una etapa fundamental en el desarrollo de los niños, ya que sienta las bases para su futura educación y aprendizaje. Es en esta etapa donde se consolidan habilidades cognitivas, emocionales, sociales y físicas que son fundamentales para su crecimiento integral. Respecto a la programación en el segundo ciclo de educación infantil debe estar enfocada en el desarrollo de competencias, habilidades y valores que sean acordes a la edad de los niños y se ajusten a sus necesidades y características individuales. Los objetivos deben abarcar diferentes áreas, como la comunicación, el razonamiento lógico, la creatividad y la convivencia.

Los contenidos deben ser variados, significativos y contextualizados para que los niños puedan relacionarlos con su vida cotidiana. Es esencial que se promueva el juego, la experimentación y la manipulación de materiales como metodologías adecuadas para el aprendizaje en esta etapa. La programación debe organizarse en unidades didácticas y/o situaciones de aprendizaje que permitan abordar diferentes áreas del conocimiento de manera integrada y coherente, sin olvidar el Diseño Universal del Aprendizaje . Cada unidad debe estar diseñada para promover el desarrollo de habilidades específicas y fomentar la curiosidad y la exploración de los niños. Para ello, podemos utilizar distintas técnicas metodológicas como aprendizaje por rincones, centros de interés,…

La coordinación y la continuidad entre la educación infantil y primaria son esenciales para facilitar la transición de los estudiantes y asegurar un aprendizaje progresivo y coherente. La colaboración entre docentes y la articulación de contenidos y metodologías son fundamentales para lograr esta continuidad. Es importante implementar medidas curriculares que atiendan a la diversidad de los estudiantes y que se ajusten a sus necesidades particulares. La inclusión de recursos y estrategias adaptadas para estudiantes con necesidades educativas especiales es fundamental para garantizar una educación inclusiva y equitativa. Finalmente, la coordinación efectiva entre docentes, equipos de apoyo, familias y autoridades educativas es esencial para el buen funcionamiento del proceso educativo. La comunicación y el trabajo conjunto entre estos actores garantizan una educación integral y coherente para los niños.

8. Bibliografía

  • Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre, por la que se modifica la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación.
  • Real Decreto 95/2022, de 1 de febrero, por el que se establece la ordenación y las enseñanzas mínimas de la Educación Infantil.