El acoso o bullying es un fenómeno que nos afecta a todos. No sólo el niño o niña que lo sufre, el acosador y sus familias. Es un problema social porque esta forma de actuar nace en los valores que inculca en primer lugar la familia, y en segundo lugar el entorno o sociedad.

Por supuesto, las consecuencias más duras las sufre la víctima. El acoso puede llevar al fracaso escolar, dificultades de aprendizaje, problemas en las relaciones sociales y en la autoestima; e incluso en algunos casos puede que las victimas de acoso desarrollen conductas agresivas para defenderse y que en un futuro se conviertan en acosadores de otros niños.

Para evitar estas situaciones debemos trabajar en el aula la educación emocional, la resolución pacifica de conflictos, las habilidades comunicativas y la negociación,…

¿Que es el bullying o acoso escolar?

Dan Olweus define bullying como “la victimización o maltrato por abuso entre iguales es una conducta de persecución física y/o psicológica que realiza el alumno o alumna contra otro, al que elige como victima en repetidos ataques. Esta acción, negativa e intencionada, sitúa a las victimas en posiciones de las que difícilmente pueden salir por sus propios medios. La continuidad de estas relaciones provoca en las victimas efectos claramente negativos: descenso en su autoestima, estados de ansiedad e incluso cuadros depresivos, lo que dificulta su integración en el medio escolar y el desarrollo normal de los aprendizajes”

En esta definición como acciones negativas son, por ejemplo amenazas, burlas, insultos, tomar el pelo, poner motes, golpes, empujones, tirar del pelo,… Es decir, acciones llevadas a cabo para incomodar o alterar a la victima.

Para hablar de bullying debe ser una acción repetida, un mal comportamiento ocasional no puede considerarse acoso escolar.

Mobbing y bullying en esencia son lo mismo, se diferencian en que mobbing se aplica en el ámbito laboral y bullying en el ámbito escolar.

En el acoso escolar, el acosador puede ser un o varios niños, al igual que la victima, puede ser una o más. Reirle las gracias al compañero que acosa implica ser cómplice de la acción intimidatoria.

Tipos de acoso escolar

Aunque existen diversas clasificaciones, basándose en un estudio nacional realizado por el Defensor del Pueblo, podemos establecer los siguientes tipos de acoso escolar:

  • Maltrato físico: Se observa con mayor incidencia en Primaria que en Secundaria. Incluye la amenaza con armas, pegar, esconder objetos, acosar sexualmente, romper y robar cosas.
  • Maltrato verbal: El más habitual. Implica insultar, poner motes, chantaje, amenazas y hablar mal de alguien.
  • Exclusión social como ignorar o no dejar participar
  • Mixto: Combinación de maltrato físico y verbal
  • Maltrato psicológico: El componente psicológico está en todas las formas de maltrato, con una gran variedad de manifestaciones. Normalmente el maltrato psicológico desemboca en el físico. El objetivo de este tipo de maltrato es minar al autoestima del individuo y fomentar la inseguridad y el temor.

Para comprender como funciona el fenómeno del acoso, debemos conocer que son los juegos psicológicos.

Los juegos psicológicos

En la infancia el niño aprende que las cosas se consiguen haciéndose la victima, acusando a los hermanos,… Estas conductas las aprende de la observación que realiza de las relaciones entre los padres, abuelos, profesores,…

De este aprendizaje erróneo derivaran más adelante los conflictos interpersonales y las principales causas de los problemas de relaciones sociales así como la insatisfacción ante la vida.

Los juegos psicológicos se presentan en todas las situaciones de la vida adulta: en el trabajo, con los amigos, la pareja… Estos juegos tienen distintos grados, a través de los que se puede llegar a minar la propia autoestima o la ajena. En resumen, los juegos psicológicos son una forma de actuar ante determinadas situaciones, tomando el papel de perseguidor, víctima o salvador. Esta decisión depende de la personalidad del individuo y del modelo aprendido durante la infancia (patrones de conducta adquiridos). En otras palabras, los juegos psicológicos son juegos de poder inconscientes y repetitivos.

Los juegos psicológicos fueron estudiados por el psiquiatra canadiense Eric Berne.

Juegos psicológicos en el aula

En este punto, quisiera centrarme principalmente en los juegos psicológicos con fines de interrupción de la clase. Interrumpir la clase o boicotear el trabajo del profesor de forma constante es un tipo de acoso que sufre el docente.

El juego del alboroto

Este tipo de juego psicológico lo lleva a cabo aquel alumno o alumna cuyo fin es alterar la armonía de la clase. Imagina la siguiente situación; estás intentando explicar algo, ya sea con una pequeña lectura o escribiendo en la pizarra; un alumno o alumna empieza a hacer ruido, a intentar hablar con su compañera en tono alto, o en otras palabras causando alboroto. ¿ Como docente que harías en ese momento?

Lo primero de todo es averiguar cual es el motivo detrás de ese comportamiento. ¿Porque el alumno o alumna juega al alboroto? ¿que obtiene de mí? ¿porque necesita tanto comportarse así? Lo que quiere es atención. Sentirse reconocido e importante. Sin duda, tiene una carencia. En el caso de Educación Primaria, según la edad podemos recurrir a técnicas de modificación de conducta o podemos hablar con él o ella sobre su comportamiento solicitando su ayuda para llevar a “buen puerto” la clase (dándole una responsabilidad). Por supuesto, antes de tomar cualquier medida debemos asegurarnos que es una “jugadora del alboroto” y conocer el origen de su comportamiento (falta de atención en casa, problemas de conducta para compartir la atención,…)

El juego del estúpido

Este niño pretende llamar la atención de los demás haciéndose el tonto o desvalido. El alumno que juega a este juego clasifica a los demás en rescatadores (alguien de quien me puedo aprovechar) o perseguidores (alguien que es malo y debo evitar). ¿Como evitar que el alumno catalogue al profesor en uno de estos dos grupos? Si el profesor adquiere un papel dialogante y amistoso, sin mostrarse agresor ni sobreprotector. Esto hará que vuelva a comportarse con normalidad.

El juego del taimado

En este tipo de juegos hay tres participantes: el cebo o víctima, el perseguidor y el taimado. El taimado conseguirá con sus comentarios, gestos y actitudes hacer creer ante el resto de los presentes que el perseguidor es injusto con los errores o accidentes a la victima. El taimado pretende que con sus comentarios sea reconocido y tenga el papel de “estar bien”. Se encarga de catalogar a los demás en victimas o perseguidores.

El juego del gato y del ratón

El alumno pretende tomar el papel de ratón y ser perseguido por el profesor. Su objetivo es provocar una reacción en la figura de autoridad.

Juego de humillación

En este juego, el alumno pretende demostrar que es mejor que otro.

Juego de pata de palo

El alumno pretende hacerse el más desvalido o desgraciado para que todos los demás le ayuden.

La víctima

Características generales de las victimas

  • Débil, inseguro, tranquilo y sensible
  • Se disgusta fácilmente
  • Tímidos y con baja autoestima
  • Tienen una visión negativa de si mismos y de sus compañeros
  • No saben defenderse
  • Son inmaduros para su edad
  • Presentan una falta de defensa aprendida
  • Son menos fuertes físicamente
  • Tienen un rasgo o característica que los diferencia del resto (gafas, obesidad, color de piel, dificultades de habla, psicomotoras o de coordinación,…)
  • Pocos amigos
  • Poca relación con el resto de compañeros
  • Escasa participación en actividades grupales
  • Pasan mucho tiempo en casa
  • Sobreproteccion en el hogar

Tipos de víctimas

Dan Olweus establece, en sus estudios, dos tipos de víctimas:

  • La activa o provocativa: Combina un modelo de ansiedad y reacción agresiva, que el agresor utiliza para justificar su comportamiento. La victima provocativa suele actuar como agresor mostrándose desafiante como respuesta de defensa ante el acoso que esta recibiendo. Suelen ser alumnos con problemas de concentración y con un comportamiento irritante a su alrededor. Pueden ser hiperactivos.
  • La pasiva: Es la más común. Son alumnos inseguros, que se muestran poco, callados y tímidos. Sufren en silencio y atemorizados la acción del agresor. Su respuesta ante el acoso puede ser llorar o ceder ante los chantajes del acosador. Esta situación los pueden convertir en personas ansiosas, temerosas y solitarias.

Consecuencias para la victima que sufre acoso escolar

  • Fracaso y dificultades escolares
  • Alto nivel de ansiedad, fobia escolar,…
  • Déficit de autoestima
  • Cuadros depresivos
  • Intentos de suicidio
  • Autoimagen negativa
  • Baja expectativa de logros o éxitos
  • No sabe defenderse (indefensión aprendida)

Agresores

Para entender el origen de las conductas de violencia e iniciar un plan de prevención de acoso escolar habrá que tener en cuenta el perfil del acosador, su edad y los motivos que le llevan a realizar humillaciones y maltrato. Las causas que llevan a dicha conducta pueden ser muy variadas: conducta aprendida, problemas en el hogar, falta de atención reconocimiento social… Las consecuencias para el agresor si sigue con ese comportamiento son que aprende que esa es la forma de obtener sus objetivos, conducta agresiva en la adultez y comportamiento antisocial, y generalización de sus conductas a otros ámbitos.

Características generales del agresor

  • Temperamento agresivo
  • Impulsivo
  • Deficientes habilidades sociales
  • Falta de empatía con la víctima, de sentimientos de culpabilidad y de control de la ira
  • Alta autoestima
  • Son autosuficientes
  • Tienen mayor fortaleza física
  • Carecen de lazos familiares y poco interés en el colegio
  • Tienen problemas en otros aspectos de la vida: problemas familiares,…
  • Sienten falta de atención
  • Sufre o ha sufrido agresiones por parte de algún familiar (comportamiento aprendido)
  • Están expuestos a mucha violencia (películas, escenas familiares,…)
  • Educación permisiva en casa

Tipos de agresores

La victima se siente desamparada

Hay cuatro tipos de agresores:

  • Activo: Establece una relación directa con la víctima en cuestión, agrediéndola de forma personal y tomando la iniciativa. No suelen actuar solos.
  • Social indirecto: Dirige de forma encubierta a sus seguidores para que realicen la acción violenta.
  • Pasivo: El sujeto no participa directamente en la acción violenta, pero apoya al agresor (es su seguidor).
  • Espectador: Son aquellos alumnos, profesores o familiares que conocen la situación de violencia y no hacen nada por evitarla.

Medidas de intervención para prevenir el acoso escolar

Algunas actividades y propuestas para una plan de prevención del acoso escolar son:

  • Reuniones con padres: En estas reuniones orientar sobre la educación de los hijos, proponer actividades con los hijos, mecanismos de comunicación familia- escuela….
  • Actividades de educación emocional
  • Actividades de mediación de conflictos
  • Asambleas y debates para tratar las distintas opiniones de los alumnos en el aula
  • Aprendizaje cooperativo
  • Círculo de calidad: Consiste en la formación de un grupo especifico de alumnos que plantea y examina un problema, lo investiga, propone una serie de soluciones y las comunica en la dirección del centro, para su revisión y puesta en marcha.
  • Mediadores escolares: Consiste en que los alumnos actúan como mediadores en conflictos planteados por sus compañeros. Por ejemplo, se establecen los mediadores de la semana que actuaran durante las horas de recreo. Así cada grupo de alumnos que tengan un conflicto acudirán a ellos para que actúen como mediador. Lo interesante de esta técnica es la modificación de comportamiento que provoca en aquellos alumnos que tienden a ser abusadores.
  • Actividades de intercambio de roles para conocer otros puntos de vista y desarrollar la empatía
  • Educación en valores
  • Mayor supervisión en determinados lugares
  • Marcar los límites, sanciones y las normas de forma clara
  • Taller de habilidades sociales
  • Método Pikas: Consiste en una serie de entrevistas con los agresores y la victima de forma individual donde se les hace tomar conciencia de la situación. Luego se realizan entrevistas de seguimiento y finalmente una entrevista grupal.
  • Método de no – inculpación: El profesor se reúne con la victima, los agresores y algunos observadores. La victima expresa su estado de sufrimiento y su preocupación. Cada alumno sugiere como cambiara su comportamiento en el futuro para que eso no vuelva a suceder.
  • Educación en los derechos humanos y en la interculturalidad
  • Actividades para desarrollar la autoestima
  • Proyecto de patios inclusivos

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